Luxemburgo se ha convertido
en el primer país en ofrecer transporte público totalmente gratis.
De lo que se trata es de una
iniciativa que ofrece transporte público gratis independientemente de la clase
social y la nacionalidad, y que, entre otras cosas, busca sacar de las calles el mayor número
posible de carros privados.
Con la mira puesta en
reducir las emisiones de carbono, Luxemburgo ha dado este paso fundamental en
su camino hacia fuentes renovables de energía, aunque sus principales objetivos
son tener una mejor calidad de movilidad y reducir las desigualdades sociales existentes
del país; porque así como Luxemburgo posee los salarios más elevados de Europa,
las desigualdades económicas han aumentado exponencialmente en los últimos años,
al grado que, según cifras oficiales, el 13 % de la población activa y el 10 %
de jubilados, se encuentran en riesgo de pobreza.
Si bien Luxemburgo es uno de
los países más pequeños de Europa y el mundo, con una población un poco mayor a
los 600 mil habitantes, su próspera economía lo ha convertido en un centro de
visitas para sus vecinos de Bélgica, Alemania y Francia, lo que provoca que
diariamente el número de vehículos aumente considerablemente, ocasionando
incluso grandes embotellamientos.
En este sentido se estima
que cada día llegan a Luxemburgo un total de 214 mil personas desde otros territorios,
más de un tercio de su población, y el 73% de ellos lo hacen en automóvil,
contribuyendo ampliamente a las emisiones de carbono del país, de las que casi
la mitad son responsabilidad del transporte.
Las autoridades de la nación
consideran que el transporte público gratuito será una de las principales herramientas
para reducir la emisión de gases de efecto invernadero, lo que ha llevado a otros
gobiernos del mundo a poner los ojos sobre la nación europea, con el objetivo
de analizar su iniciativa y tratar de replicarla, de cara a adoptar prácticas más
amigables con el medio ambiente.
A todo lo anterior hay que
añadir que al ser Luxemburgo un país muy pequeño, la transición hacia energías
verdes es menos compleja, al punto de que hoy cuenta con importantes
inversiones en ese sector; solo en 2018 logró incrementar su producción de
energías renovables hasta en un 35%, lo que se traduce en 605 gigawatts,
equivalente al 9.25% del consumo nacional.
Con una inversión en
ferrocarriles y autobuses totalmente eléctricos de 3.9 mil millones de euros,
para un plazo de diez años, se espera que el sistema esté completamente
operativo para 2030, pues hay que entender que un cambio de estas proporciones
demanda de una implementación a largo plazo, y de forma paulatina.
En estos momentos tanto los ciudadanos como los visitantes ya pueden disfrutar de esta iniciativa completamente gratis, aunque aún se mantienen otros servicios de primer nivel, pero claro, con su correspondiente costo.
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