
Este jueves, la Agencia Internacional de Energía
Atómica proporcionó información sobre el desmantelamiento de la central nuclear
japonesa en Fukushima, víctima de un tsunami en 2011.
Por
Cuba Impacto
Se
han logrado "avances notables" en el desmantelamiento de la central
nuclear japonesa de Fukushima, dañada en 2011 por un tsunami, estimó este
jueves el director de la Agencia Internacional de Energía Atómica (OIEA),
Rafael Grossi, tras una visita in situ.
Para
controlar los trabajos realizados, "vamos a estar aquí antes, durante y
después del proceso" de desmantelamiento de estas instalaciones que
debería durar décadas y ha encontrado diversas dificultades, en particular la acumulación
de agua contaminada, dijo.
“Estamos al frente y las cosas van bien”, agregó Rafael Grossi, quien se encuentra en un viaje de dos días a Japón, señalando que está “realmente impresionado por el notable progreso que, a pesar de la pandemia, se ha logrado en los dos últimos años".
.@IAEAorg has been, is, and will continue to be at #Fukushima Daiichi to provide independent monitoring of the discharge of treated water into the Pacific Ocean. I visited the facility today, here's my message 👇 pic.twitter.com/fnWqtAcpuG
— Rafael MarianoGrossi (@rafaelmgrossi) May 19, 2022
Un millón de toneladas de agua
El
11 de marzo de 2011, un terremoto submarino frente a la costa este de Japón
desencadenó un maremoto que desbordó los sistemas de refrigeración de varios
reactores de la central eléctrica de Fukushima Daiichi y provocó el peor
accidente nuclear del mundo desde el ocurrido en abril de 1986, en Chernóbil,
Ucrania.
En
particular, habrá que hacer un trabajo minucioso en el futuro para extraer el
combustible que se ha derretido de los reactores dañados. En el corto plazo,
más de un millón de toneladas de agua actualmente almacenadas en enormes
embalses deben ser removidas del sitio.
El
gobierno japonés ha aprobado un plan para verter esta agua al océano después de
tratarla para, en particular, eliminar casi todos los radionucleidos que
contiene. Este proceso recibió luz verde del OIEA, una agencia de la ONU, y,
esta semana, de la Autoridad Reguladora Nuclear de Japón.
Unos 18.500 muertos o desaparecidos
En
un mensaje de video tuiteado desde Fukushima, Rafael Grossi insistió en que la
descarga de esta agua sería "en pleno cumplimiento de los estándares
internacionales y, por lo tanto, no causaría ningún daño al medio
ambiente". Pero el plan ha despertado la preocupación de las comunidades
pesqueras locales preocupadas por la reputación de sus capturas y las críticas
de China y Corea del Sur.
El
desastre de 2011 en el noreste de Japón dejó alrededor de 18.500 personas
muertas o desaparecidas, la mayoría de las cuales murieron en el propio
tsunami. A decenas de miles de residentes alrededor de la planta de Fukushima
se les ordenó evacuar sus hogares o decidieron hacerlo.
Alrededor
del 12% de la región había sido declarada oficialmente peligrosa, pero las
áreas prohibidas ahora cubren solo el 2,4% del territorio de la prefectura,
aunque la población de muchas ciudades sigue siendo mucho menor que antes de la
tragedia.