Presentes entre los ocho ciudadanos turcos
secuestrados a principios de mayo en Haití, tres jóvenes fueron liberadas este
fin de semana por “razones de salud”.
Por
Cuba Impacto
Tres
jóvenes, entre los ocho ciudadanos turcos secuestrados el 8 de mayo en Haití
por una pandilla, fueron liberadas el fin de semana por motivos de salud, dijo
el operador del autobús en el que viajaban antes de ser secuestradas. Fueron
"liberados este fin de semana por motivos de salud, porque estaban
enfermos", dijo a la AFP Michaelle Durandis, representante de la empresa
de autobuses Metro.
El
autobús, procedente de la capital dominicana, Santo Domingo, con destino a
Puerto Príncipe, había sido secuestrado en Haití por una de las bandas armadas
más poderosas del país, poco después de cruzar la frontera. Doce personas iban
a bordo en ese momento: ocho ciudadanos turcos, tres haitianos y un dominicano.
Los
ciudadanos turcos, de entre 20 y 26 años, son miembros de una asociación
educativa y religiosa presente en el país desde 2019 y que imparte cursos de
idiomas y educación religiosa musulmana, según su página web. Los dos empleados
de la empresa de transporte, una azafata haitiana y el chofer dominicano,
habían sido liberados menos de una semana después del secuestro del autobús.
Rescate
Los
dos pasajeros haitianos también fueron liberados, a cambio de un rescate cuyo
monto se desconoce, indicó Michaelle Durandis, quien no precisó la fecha de su
liberación. "Los secuestradores todavía tienen a los cinco hombres turcos
y todavía están en posesión del autobús de la empresa", dijo la portavoz.
La
policía está luchando para detener el control de las pandillas sobre la capital
haitiana y el país: solo en el mes de mayo, al menos 200 secuestros han sido
registrados por la ONU, delitos cometidos en su mayoría en Puerto Príncipe.
Una
de las bandas más poderosas de Haití, "400 mawozo", controla desde
hace varios años la zona donde fueron secuestrados los ciudadanos turcos,
ubicada entre República Dominicana y la capital haitiana. En abril de 2021,
esta banda armada ya había secuestrado a diez personas, incluidos dos clérigos
católicos franceses, antes de secuestrar en otoño a un grupo de 17 personas,
misioneros norteamericanos y miembros de sus familias, liberados después de
varias semanas.
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