Australia pagará 584 millones de dólares a Naval Group
por romper el gigantesco contrato de los submarinos franceses en septiembre de
2021.
Por
Cuba Impacto
Australia
dio a conocer este sábado un acuerdo de compensación masiva con el fabricante
francés de submarinos Naval Group, poniendo así fin a una disputa que ha agriado
las relaciones entre Canberra y París durante casi un año.
El
nuevo primer ministro de Australia, Anthony Albanese, dijo que la empresa
francesa había llegado a un "acuerdo justo y equitativo" de 584
millones de dólares por el incumplimiento del gigantesco contrato (de 58.000
millones de francos), que había provocado una crisis diplomática entre París y
Canberra en septiembre de 2021.
Recordemos
que en ese momento (septiembre de 2021), el entonces primer ministro
australiano, Scott Morrison, rescindió repentinamente el contrato francés que
se había estado preparando durante años. El jefe de gobierno anunció que su
país compraría submarinos de propulsión nuclear estadounidenses o británicos,
un cambio importante para un país con capacidades nucleares débiles.
Enmendar las relaciones
Scott
Morrison luego provocó la ira del presidente francés Emmanuel Macron, quien lo
acusó de engaño. Las relaciones entre los dos países permanecieron frías hasta
la elección en mayo del centroizquierdista Anthony Albanese.
Desde
que llegó al poder, Albanese se apresuró a enmendar las tensas relaciones con
Francia, Nueva Zelanda y las naciones insulares del Pacífico que culparon al
gobierno conservador anterior por su lentitud en el asunto del cambio
climático.
“Estamos
en el proceso de restaurar una mejor relación entre Australia y Francia”, dijo
Anthony Albanese, y dijo que estaba “esperando responder a la invitación que me
hizo el presidente Macron de ir a París por primera vez”.
Obra maestra
En
total, el fracaso del contrato del submarino francés habrá costado 2.400
millones de dólares a los contribuyentes australianos, ha dicho su primer
ministro, sin que puedan sacar beneficio alguno. El contrato del submarino es
la pieza central de la estrategia de defensa de Australia contra la creciente
influencia de China en la región bajo la presidencia de Xi Jinping.
Los
submarinos de propulsión nuclear podrían permitir que Australia opere de manera
más sigilosa y disuasoria desde China. Pero existe una gran incertidumbre sobre
cuándo Australia podrá poseer estos dispositivos.
Es
poco probable que el primer submarino estadounidense o británico esté en
servicio durante décadas, dejando un vacío para Australia con su flota
envejecida. La elección del proveedor tendrá un impacto económico significativo
e implicaciones estratégicas, vinculando estrechamente a la Marina australiana
con la de la nación elegida.
El ex
ministro de Defensa y actual líder de la oposición, Peter Dutton, dijo esta
semana que había decidido obtener suministros de Estados Unidos, una revelación
inusual dada la sensibilidad de las negociaciones en curso. El actual gobierno
ha insistido en que aún no se ha tomado ninguna decisión.
Francia “toma nota” de este acuerdo
El
fabricante francés de submarinos Naval Group confirmó este sábado que había
firmado un “acuerdo justo” con Australia por el incumplimiento de un gigantesco
contrato que había agriado las relaciones entre París y Canberra. El grupo no
menciona una cantidad en su breve comunicado de prensa.
El
ministro francés de las Fuerzas Armadas, Sébastien Lecornu, dijo el sábado
"tomar nota" del acuerdo de compensación entre el fabricante francés
de submarinos Naval Group y Australia que permitirá relanzar las relaciones con
Canberra. "Tomo nota de que este acuerdo le conviene a Naval Group (...)
este acuerdo es importante porque nos permitirá abrir una nueva página en
nuestra relación bilateral con Australia y mirar hacia adelante", dijo el
ministro a periodistas en Singapur.
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