El jefe del ejército birmano espera encontrar una
salida a la crisis derivada del golpe. Pero después de completar todos los
trámites legales de la ex opositora.
Por
Cuba Impacto
El
jefe de la junta birmana dijo este viernes que estaba listo para negociar con
la exlíder Aung San Suu Kyi, después de su juicio, para encontrar una solución
a la crisis desatada por el golpe de Estado militar el año pasado. “Una vez que
se completen los procedimientos en su contra, de acuerdo con la ley,
consideraremos negociaciones basadas en su respuesta”, dijo Min Aung Hlaing.
Aung
San Suu Kyi, de 77 años, Premio Nobel de la Paz en 1991, fue arrestada durante
el golpe militar del 1 de febrero de 2021, que derrocó a su gobierno y puso fin
a un breve período de democracia en Birmania. Desde entonces, ha sido
sentenciada a un total de 17 años de prisión por una serie de cargos y se
enfrenta a décadas adicionales de prisión si es declarada culpable de otros delitos
en un juicio cerrado ante un tribunal militar.
Sin periodista, sin abogado, sin indicación
Los periodistas no pudieron asistir al proceso, sus abogados no pudieron hablar con la prensa y la junta no dio ninguna indicación de cuándo terminarían sus juicios. En julio, un portavoz de la junta dijo a la AFP que no era "imposible" que el régimen militar entablara un diálogo.
🇲🇲 En #Birmanie, la visite d’une émissaire de l’ONU intervient au lendemain d’une nouvelle condamnation d’#AungSanSuuKyi et dans un pays où les combats font rage dans de nombreuses régions ⤵️ https://t.co/0KahxgIfam
— Libération (@libe) August 17, 2022
Esta
semana, la enviada especial de la ONU, Noeleen Heyzer, realizó su primer viaje
a Birmania desde su nombramiento en octubre de 2021 y se reunió con Min Aung
Hlaing y otros funcionarios de la junta. Pidió el fin de toda violencia y la
liberación de todos los presos políticos, y pidió poder reunirse con Aung San
Suu Kyi, que se encuentra en régimen de aislamiento en una prisión de la
capital. Pero no pudo reunirse con ella y las organizaciones de derechos
humanos dijeron que era poco probable que su visita persuadiera a los militares
para entablar un diálogo con los opositores.
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