Un hombre ingresó a la casa de Nancy Pelosi en San
Francisco el viernes por la mañana, pero la líder demócrata estaba en
Washington.
Por
Cuba Impacto
Un
hombre atacó al esposo de la congresista demócrata Nancy Pelosi este viernes
por la mañana, dijo la policía, pero el presunto agresor en realidad buscaba a la
líder estadounidense, otra ilustración de los peligros que se ciernen sobre los
funcionarios electos a dos semanas de las elecciones de mitad de período.
Alrededor
de las 2:30 a.m. del viernes, el sospechoso de 42 años ingresó a la casa de la
pareja en San Francisco y "atacó violentamente" a Paul Pelosi con un
martillo, dijo el jefe de policía de esta metrópoli de California, Bill Scott.
Este
hombre en realidad estaba buscando a Nancy Pelosi y “amenazó de muerte” a su
esposo, dijo más tarde el portavoz de la presidente de la Cámara de
Representantes, Drew Hammill. Nancy Pelosi, de 82 años, estaba en Washington en
el momento del ataque.
"Lesiones graves"
Paul
Pelosi, también un octogenario, “se sometió a una cirugía exitosa para tratar
una fractura de cráneo y lesiones graves en el brazo derecho y las manos”,
agregó Drew Hammill. Los médicos “creen que se recuperará por completo”, dijo.
Los
motivos del sospechoso, que ha sido detenido, son objeto de una investigación
en la que participan la policía federal -el FBI- y la policía del Capitolio,
encargada de proteger a los miembros del Congreso.
Toda
la clase política estadounidense condenó enérgicamente este ataque. La portavoz
de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, dijo que el presidente Joe Biden habló
con Nancy Pelosi por la mañana. El líder de la oposición republicana en el
Senado, Mitch McConnell, dijo que estaba “horrorizado y disgustado” por la
noticia.
Violencia “atroz”
En
los últimos meses, muchos funcionarios electos han advertido contra el
resurgimiento de la violencia contra la clase política estadounidense, y la
senadora republicana Susan Collins declaró que no le "sorprendería"
si un funcionario electo o un senador "fuera asesinado".
“Lo
que originalmente eran solo llamadas telefónicas agresivas ahora se traducen en
amenazas y violencia real”, aseguró la funcionaria electa de 69 años, luego de
que un individuo rompiera una ventana en su casa, en Maine. “Esta violencia es
aterradora”, denunció el viernes la progresista electa Pramila Jayapal, quien
ella misma tuvo que llamar a las autoridades cuando un hombre había ido a su
casa varias veces en julio profiriendo insultos con un arma en el cinturón.
Los
actos de violencia contra funcionarios electos estadounidenses no son nuevos.
En enero de 2011, la demócrata Gabby Giffords estuvo a punto de morir tras
recibir un disparo en la cabeza durante una reunión con ciudadanos en Tucson.
Pero según la Policía del Capitolio, las amenazas contra los miembros del
Congreso se han más que duplicado desde 2017.
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