La Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) ha indicado que las armas de este tipo declaradas en todo el mundo pronto serán completamente destruidas.
Por Cuba Impacto
La
Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) dijo el miércoles
que el proceso de destrucción de decenas de miles de toneladas de armas
químicas declaradas en todo el mundo se completaría "en unas
semanas". Sin embargo, durante una presentación de un nuevo centro
técnico cerca de su sede en La Haya, Países Bajos, la OPAQ señaló las nuevas
amenazas que plantea la inteligencia artificial en la lucha contra las armas
químicas.
“Se
han destruido más de 70.000 toneladas de los venenos más peligrosos del mundo
bajo la supervisión de la OPAQ”, dijo a periodistas su director, Fernando
Arias. Un pequeño remanente de armas químicas almacenadas en Estados
Unidos será destruido "en unas semanas", agregó.
Desde
la Convención sobre Armas Químicas, el tratado que prohíbe el uso de armas
químicas implementado en 1997, la OPAQ ha destruido 72.118 toneladas de
arsenales declarados por países de todo el mundo, o el 99%. “Quedan
aproximadamente 127 toneladas de armas declaradas en dos instalaciones”
ubicadas en Colorado y Kentucky, dijo la OPAQ a la AFP. "Después de
26 años, este es un gran logro para la organización", dijo.
Inventario
abandonado
Pero
advierte que el planeta todavía alberga miles de arsenales de armas químicas
abandonadas, incluidos los restos, por ejemplo, de la ocupación japonesa de
China antes de la Segunda Guerra Mundial. Las armas químicas que datan de
la Primera Guerra Mundial siguen siendo un peligro muy real en la
actualidad. “Se siguen descubriendo restos de cuatro armas químicas todos
los días”, dijo la OPAQ, ganadora del Premio Nobel de la Paz en 2013.
El
régimen del presidente sirio Bashar al-Assad acordó en 2013 unirse a la
organización y renunciar a todas las armas químicas, luego de un presunto
ataque con gas sarín que mató a 1.400 personas en los suburbios de Ghouta en
Damasco. Pero el régimen sirio ha sido acusado repetidamente de ataques
con armas químicas desde entonces. Hablando en las nuevas instalaciones de
la OPCW en Nootdorp, Fernando Arias dijo que los investigadores de la
organización habían "aprendido mucho en Siria".
Con
un costo de más de 34 millones de euros, el nuevo centro, que se inaugurará
oficialmente la próxima semana, reemplaza una instalación más antigua, más
pequeña y obsoleta en La Haya. Contiene un laboratorio, un espacio de
almacenamiento para equipos costosos utilizados por los investigadores y un
centro de capacitación para hacer frente a las amenazas que plantean las nuevas
armas químicas.
"Nuevos
venenos"
“Con
la inteligencia artificial se producen nuevos venenos y ahora es mucho más
fácil que antes”, advirtió Arias.
Por
otra parte, la invasión rusa de Ucrania ha aumentado la amenaza del uso de
armas de destrucción masiva, incluidas las municiones químicas, dijo el jefe de
la OPAQ en noviembre. Desde el inicio de la guerra en Ucrania se han
intercambiado amenazas y denuncias sobre el posible uso de armas nucleares,
químicas y biológicas, pero sin evidencia de que hayan sido desplegadas.
Rusia es miembro de la OPAQ y ha dicho que ya no tiene un arsenal químico militar, pero el país enfrenta presiones para que haya más transparencia sobre el presunto uso de armas tóxicas. En 2020, el opositor al Kremlin Alexei Navalny, ahora encarcelado, fue víctima de un grave envenenamiento en Siberia, del que acusa a las autoridades rusas. En 2018, el exagente de la KGB Sergei Skripal fue envenenado con Novichok en el Reino Unido. Moscú siempre ha negado cualquier participación en ambos incidentes.
Publicar un comentario