Las autoridades señalan que durante la detención uno
de los sospechosos se resistió y sacó un arma de fuego, y al manipular "se
autolesionó y murió en el lugar".
Por
Cuba Impacto
La
Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) informó que uno de
los asesinos del médico cubano Ernesto Oliva Legra fue detenido en una clínica
privada de Ecatepec de Morelos y que otro murió durante su arresto.
Ambos
criminales -cuya identidad no ha sido revelada- eran conductores de "taxis
irregulares" y habían sido contratados para asesinar a una mujer que ya
había sido dada de alta, algo que desconocían en el momento en que asaltaron el
hospital.
De
acuerdo con la investigación, los agresores utilizaron al menos tres vehículos,
dos de ellos fueron localizados y eran utilizados como taxis irregulares que
prestaban servicio en el municipio de Coacalco. Las autoridades señalaron que durante
la detención uno de los sospechosos se resistió y sacó un arma de fuego, y
agregan que "al manipular el arma se autolesionó y murió en el
lugar".
El
detenido fue trasladado al Ministerio Público de San Agustín donde confirmó en
declaraciones a las autoridades, que habían sido contratados para matar a una
mujer que estaba ingresada en la clínica de la Unidad Materno Infantil en la
colonia Tierra Blanca, donde trabajaba el médico Ernesto Oliva Legra, lo que
confirma que él no era el objetivo.
Según
un informe previo citado por la prensa local, cuando los agresores revisaban
los registros de ingreso, el médico cubano, que estaba de guardia, salió a ver
lo que ocurría y recibió un disparo en la cabeza. Luego, como los agresores no
encontraron el registro de la mujer, amenazaron a un empleado, que se vio
obligado a permitirles el acceso a la segunda planta, lugar en el que le dispararon
a otras dos mujeres, una enfermera de unos 20 años, llamada Abigail, y Sofía,
una mujer de 65 años que acompañaba a un paciente.
Hay
que apuntar que las dos mujeres murieron en el acto, no así el médico cubano,
que fue trasladado con vida a otro hospital para recibir atención
especializada, donde murió poco después. El cuerpo de Ernesto Oliva, de 32
años, permanece en el Servicio Forense del Ministerio Público de San Agustín.
"Hasta
el momento, la embajada de Cuba en México y la familia no se han puesto de
acuerdo para trasladar el cuerpo del médico a su país de origen", según la
prensa mexicana.
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