Por
Cuba Impacto
A raíz
de que el régimen cubano iniciara una nueva campaña para “luchar contra las
ilegalidades y el acaparamiento”, cientos de cuentapropistas en todo el país
han optado por cerrar sus negocios, pues ante el incremento de redadas
policiales y el accionar represivo de los inspectores, es imposible sostener
las ventas.
De acuerdo
con un reporte de a Radio Televisión Martí varios comeciantes de viandas
entrevistados decidieron dejar de vender públicamente por temor a posibles
multas y decomisos.
“Los
inspectores ahora mismo están en la calle, arriba de los particulares todo el
tiempo”, contó al medio Vladimir Martín Castellanos de la provincia de Las
Tunas.
“Nosotros
hemos optado por cerrar el puesto, porque para buscarse problemas y tener que
pagar las altas multas, no es lógico que uno se ponga a vender. Por tanto, en estos
momentos estamos en cero”.
Asimismo
otros cuentapropistas del centro del país aseguraron que están siendo acosados
por los inspectores y la policía.
En
las últimas semanas la policía ha protagonizado redadas en casas particulares y
han decomisado cientos de productos cuyos propietarios adquirieron, según las
autoridades, “de forma ilícita”.
Por
su parte los cuentapropistas alegan que no existe otro modo de surtir
cafeterías y restaurantes que no sea recurriendo al mercado informal, pues no
existe posibilidad de venta mayorista en Cuba en moneda nacional.
Varios
reportes desde La Habana confirman una notable disminución de la oferta de
frutas y granos en los agros de la capital en los últimos días, debido a que
gran parte de los vendedores marcharon con la mercancía hacia sus casas para
evitar ser multados por los inspectores o que les confisquen sus productos.
Publicar un comentario