Por Cuba Impacto
Joe Biden afirmó este
viernes 3 de diciembre que prepara "iniciativas" para defender a Ucrania
en caso de invasión, declaraciones éstas que llegan antes de un intercambio con
su homólogo Vladimir Poutine previsto para los próximos días.
El presidente estadounidense,
afirmando estar en "contacto constante" con los aliados de Estados
Unidos y los ucranianos, declaró desde la Casa Blanca: "Estoy preparando
lo que será, creo, el conjunto de iniciativas más amplio y relevante, para hacer
que sea muy, muy difícil para Putin hacer lo que la gente teme que esté
haciendo".
Joe Biden, quien estaba
respondiendo a una pregunta formulada después de un discurso sobre la economía,
no dio más detalles.
Por su parte la Secretaria
de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, señaló que "Hay una serie de
herramientas a nuestra disposición. Por supuesto, las sanciones económicas son
una opción", y declinó responder a una pregunta sobre posibles acciones militares
de los estadounidenses.
El presidente estadounidense
y su homólogo ruso pronto debatirán directamente las tensiones en Ucrania,
siete años después de la anexión rusa de Crimea y la toma de parte del este de
la ex república soviética por fuerzas separatistas prorrusas. Pero se desconocen
la fecha exacta y las modalidades de esta conversación.
Los dos hombres se habían
visto en persona en Ginebra en junio. Pero desde entonces, Joe Biden ha
centrado en gran medida sus esfuerzos diplomáticos en la rivalidad de Estados
Unidos con China: mantuvo un total de tres largas conversaciones con el
presidente Xi Jinping, incluida una videoconferencia que duró varias horas el
15 de noviembre.
No hay duda de que al reunir
decenas de miles de soldados en la frontera con Ucrania, como le reprochan
Washington y Kiev, Vladimir Poutine ha recuperado la atención de su homólogo
estadounidense.
Para aliviar las tensiones,
Moscú pide "garantías de seguridad" y, en particular, la seguridad de
que la OTAN no seguirá expandiéndose hacia el este, en particular con la
adhesión de Ucrania.
Kiev, por su parte, se niega
categóricamente a abandonar tal proyecto de membresía, formalmente sobre la
mesa desde 2008. Unirse a la OTAN significaría que los otros países de la
alianza, Estados Unidos a la cabeza, estarían obligados a intervenir
militarmente a favor de Ucrania en caso de agresión.
Por otro lado, Biden tampoco
oculta su impaciencia con los problemas de corrupción y gobernabilidad en
Ucrania. Al recibir al presidente ucraniano Volodymyr Zelensky en la Casa
Blanca a principios de septiembre, había prometido "apoyar la soberanía y
la integridad territorial de Ucrania frente a la agresión rusa", pero
había hecho pocos avances en este tema candente de la pertenencia a la OTAN.
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